central de biogás

¿Qué es el biogás?

El biogás es un tipo de gas renovable que se obtiene a partir de los desechos orgánicos de industrias como la alimentaria, la agrícola o la ganadera. Básicamente, allí donde hay materia orgánica biodegradable (que se descompone) es posible obtener este biocombustible.

En la naturaleza todo residuo orgánico equivale a nutriente para otros seres vivos. El biogás sigue este mismo principio incluso en los entornos urbanos , donde también se generan una gran cantidad de residuos biodegradables tales como mondas de fruta, posos de café y otros restos que se acumulan en el contenedor de residuos orgánicos. Utilizando estos desechos como materia prima y otros, como los lodos que producen las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR), es posible fabricar biogás y darle diferentes usos.

La transformación de residuos en gases combustibles de baja huella de carbono permite reducir el volumen de basura que se deposita en los vertederos, lo que genera un impacto positivo en el medioambiente, que es parte del proceso de economía circular, y tiene un papel esencial en el proceso de descarbonización.

Por ejemplo, el biogás puede utilizarse para propulsar un autobús urbano fomentando la movilidad sostenible. También es posible mezclarlo con gas natural para alimentar calderas, cocinas, calefacciones, etc. Incluso puede emplearse como combustible para alimentar generadores de electricidad.

¿Cómo se obtiene el biogás?

El biogás se produce mediante un proceso de digestión anaeróbica (en ausencia de oxígeno) de la materia orgánica. Este proceso se lleva a cabo en un biodigestor, que no es otra cosa que un contenedor cerrado donde se deposita dicha materia orgánica. 

El proceso de obtención del biogás tiene lugar en cuatro etapas diferenciadas. A lo largo de ellas intervienen diversos microorganismos, principalmente bacterias, capaces de descomponer la materia orgánica en moléculas y compuestos de diversa índole, liberando además gases como el hidrógeno o el metano. Estas etapas son:

  1. Hidrólisis
  2. Acidogénesis
  3. Acetogénesis
  4. Metanogénesis

Este proceso se puede llevar a gran escala gracias a las plantas de biogás, capaces de recibir toneladas de residuos orgánicos industriales, en estas plantas también se hace el biometano. De esta manera además se da un impulso a la economía circular, ya que dichos residuos son aprovechados en lugar de acabar en vertederos.

 

ganadería pastando en el campo

En España existe un gran potencial para la producción de biogás.

La ganadería y la agricultura, con una fuerte presencia en nuestro país, producen multitud de residuos.

Existe por tanto una gran disponibilidad de materia orgánica que puede ser aprovechada y convertida en biogás.

Proyectos de biogás de Repsol

El puerto de Bilbao acogerá una planta de generación de biogás a partir de residuos urbanos es una de las iniciativas de economía circular pionera en el ámbito de este biocombustible.

Según explica Vicente Bernal, Senior Scientist del centro de investigación de Repsol , “el proyecto de Bilbao nos permite obtener un gas de baja huella de carbono que se utilizará como combustible en la refinería Petronor, lo que evitará emisiones de gases de efecto invernadero y ayudará a reducir la huella de carbono de los procesos".

Mediante este proyecto, en Repsol nos alineamos con nuestro compromiso de ser una compañía Cero Emisiones Netas en 2050, los objetivos de descarbonización de la Unión Europea y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Esta iniciativa tiene como meta dar uso a 10.000 toneladas de residuos urbanos al año, llegando a alcanzar las 100.000 toneladas en el futuro. 

Cualquier ciudadano puede formar parte de este proceso de economía circular. Solo es necesario separar los residuos para reciclar. Así, pueden contribuir a este ciclo y a la generación de energía sostenible y renovable.