Economía colaborativa
Economía colaborativa
La economía colaborativa consiste en compartir bienes o servicios a cambio de una compensación pactada de antemano, ya sea económica o de otra índole.
Cómo reciclar aceite usado
Aceite vida extra
La importancia del reciclaje de aceite usado
En España se generan unos 150 millones de litros de aceite de cocina usado al año; en el sector HORECA (hoteles, restaurantes y cafeterías) se recupera en torno al 72 %, pero en los hogares la cifra apenas alcanza el 5 %.
Reciclar el aceite usado tiene numerosos beneficios: permite fabricar combustibles renovables y disminuye la necesidad de extraer nuevas materias primas, entre otros. ¿Quieres saber cómo hacerlo correctamente? A continuación, te damos algunos consejos y pautas.
Antaño, el uso principal que solía darse al aceite usado en los hogares era el de hacer jabón casero; sin embargo, debido al tiempo que requiere y a la dificultad que entraña esta práctica, ya no es tan habitual como antes, por lo que el aceite se desecha con más frecuencia. Esto, sumado a que se conocen otros usos que permiten sacarle el máximo partido a este residuo, pone de manifiesto la importancia de reciclarlo de forma correcta.
Mejorar estos datos y porcentajes es precisamente el objetivo de la Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados para una economía circular, por la que los ayuntamientos deberán haber implantado sistemas de recogida específicos para los residuos aprovechables en 2025 (entre los que se encuentra el aceite).
¿Por qué es importante reciclar?
Cómo reciclar aceite usado
Usos del aceite vegetal usado
Hoy día, el aceite usado puede tener una vida útil muy provechosa y utilizarse para distintos fines. Entre ellos, cabe destacar la fabricación de combustibles renovables, que permiten un aprovechamiento máximo de este recurso.
No obstante, su versatilidad va mucho más allá: también puede utilizarse para fabricar surfactantes —base de numerosos productos de uso cotidiano, como detergentes, cremas cosméticas, pinturas o barnices—, así como velas o fertilizantes, entre otros. Se trata, por tanto, de un residuo que conserva su valor más allá del primer uso.
Comunidades energéticas
Ciudadanos, pymes, cooperativas o entidades locales... La lucha contra el cambio climático es cosa de todos.
En Repsol, ya hemos comenzado la tenemos la que será la primera planta de biocombustibles avanzados—esto es, combustibles renovables fabricados a partir de materias primas orgánicas, como la biomasa y residuos orgánicos—de España. Se ubica en Cartagena (Murcia) y el objetivo es producir 250 000 toneladas de biocombustibles avanzados al año, como biodiésel, biojet, bionafta y biopropano. Esto contribuirá significativamente a la reducción de las emisiones de CO2 en sectores especialmente difíciles de descarbonizar, como el transporte marítimo, la aviación o la industria pesada. De hecho, en relación con el aceite, Repsol fabricará biocombustibles avanzados para la compañía Ryanair en esta planta: a partir de aceite de cocina usado y otros residuos de la industria alimentaria, producirá un combustible sostenible que impulsará los aviones de la aerolínea entre 2025 y 2030.
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Todo sobre el biodiésel
El biodiésel es un combustible de origen natural, renovable y limpio. Su uso permite reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, ya que se produce a partir de materia orgánica.