¿Por qué se habla de manera frecuente sobre cómo ahorrar agua? Fíjate en los siguientes datos. Cerca del 70% de la superficie de nuestro planeta está formada por agua. De ese 70%, el 97% es salada, por lo que no es apta para el consumo humano. Y alrededor del 2% es dulce, que es la que utilizamos para llevar a cabo diferentes actividades y como agua potable, una vez haya pasado por procesos de filtrado.
Este fluido se encuentra en casi todos los procesos de los organismos vivos, ya sean vegetales, animales o humanos. Es más, el propio cuerpo humano está formado por un 65% aproximadamente de agua y necesita ingerirla cada día para que su organismo funcione correctamente. Por eso queremos compartir contigo algunas acciones que favorecen el ahorro de agua.
Es cierto que cada vez más las personas se preocupan por este tema y aprenden sobre cómo ahorrar agua en casa. No obstante, siempre se puede aprender algún hábito más sobre consumo responsable para reducir nuestra huella ecológica. La huella ecológica hace referencia al impacto que nuestras actividades tienen sobre el entorno en términos de consumo de recursos y generación de residuos. En el caso del agua, no solo se trata del recurso en sí, sino de toda la energía que se requiere para su extracción, tratamiento y distribución. Para ello, nos apoyamos en el principio de la economía circular, esencial para un modelo económico de desarrollo sostenible, que se basa en las 7 erres: reducir, reutilizar, reparar, renovar, reciclar, recuperar y rediseñar.