Los plásticos protegen nuestros alimentos
Piensa en una patata frita. Una de sus características fundamentales es que esté crujiente. Y para conseguirlo es esencial la utilización de bolsas de polipropileno. Un material que evita la entrada y salida de humedad manteniendo inalterado su aroma y su sabor. Como la leche que consumes cada día. Esta conserva todos sus valores nutricionales y sabor gracias a las botellas tricapa fabricadas con polietileno y tapón de rosca de polipropileno.
Los plásticos contribuyen al ahorro energético
Gracias a la innovación tecnológica es posible producir envases cada vez más ligeros. Su peso relativo se ha reducido un 28% en los últimos 10 años. Esto supone un gran ahorro de materia prima y carburante en los vehículos que lo transportan y, por tanto, una disminución de las emisiones. Además, estos materiales son reciclables y representan una fuente de energía alternativa.
Los plásticos ayudan a reducir el desperdicio de alimentos
Para mantener un pepino fresco durante dos semanas solo necesitas 1,5 gr de plástico. Gracias al polietileno de alta y baja densidad, se pueden obtener filmes que proporcionan una óptima protección y conservación de alimentos, reduciendo también los residuos y el uso de conservantes.
A su vez, los copolímeros Repsol Primeva® y Repsol Ebantix® se utilizan en adhesivos que permiten abrir y volver a cerrar envases para que los alimentos se conserven con todas sus propiedades y no desperdiciar nada.
Otro ejemplo de la contribución de los plásticos en la preservación de los alimentos es el uso del polietileno lineal metaloceno de baja densidad (mPELBD). Sus excelentes propiedades ópticas, como la trasparencia y el brillo, y sus propiedades mecánicas como la estirabilidad, soldabilidad y resistencia a la punción, evitan roturas en los envases. Gracias a ello, podemos ver el producto sin tocarlo y dañarlo.
Los populares envases herméticos para alimentos están hechos de polipropileno, un material altamente resistente al frío y al calor, que permite calentar y conservar los alimentos a altas y bajas temperaturas.