detalle de una hoja (la reforestación es una de las soluciones al cambio climático)

Tiempo de lectura: 9 min

Combatir el cambio climático es uno de los grandes desafíos de nuestra sociedad. Las acciones encaminadas a descarbonizar la economía son claves para hacer frente a este reto global. No obstante, tal como indica la Agencia Internacional de la Energía (IEA) en su informe “CCUS in clean energy transitions”, si queremos alcanzar los objetivos del Acuerdo de París para 2050 en materia de energía y clima, los esfuerzos no deben estar orientados únicamente a reducir el CO2, sino también a retirarlo. 

Medidas y soluciones para combatir el cambio climático

Los efectos del cambio climático son una realidad que afecta a nuestro entorno y es urgente actuar con la máxima rapidez para reducir su huella.

En 2015, 196 países alcanzaron un acuerdo histórico para solucionar el cambio climático, el Acuerdo de París, cuyo objetivo es limitar el calentamiento mundial en este siglo por debajo de 2 grados centígrados, preferiblemente a 1,5, en comparación con los niveles preindustriales. 

La aplicación de este acuerdo requiere que países, regiones, ciudades y empresas acometan una transición energética efectiva sin comprometer su competitividad. Estas son algunas de las medidas y soluciones para avanzar en esta senda: 

Pactos internacionales: las cumbres sobre el cambio climático  

Existe un consenso internacional en la necesidad de encontrar medidas para combatir el cambio climático a nivel mundial. En términos de compromiso y coordinación internacionales, la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático fue la acción más importante en la lucha contra el calentamiento global y sus efectos hasta la fecha. A continuación, vamos a hacer un breve recorrido histórico por los pactos internacionales más relevantes para combatir el cambio climático. 

La Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), adoptada en 1992 en la Cumbre para la Tierra celebrada en Río de Janeiro.

Entró en vigor en 1994, siendo ratificada por 195 países (Partes de la Convención). El acuerdo reconoce la existencia del problema del cambio climático y establece como objetivo último lograr la estabilización de las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera. Además, indica un plazo para alcanzar ese nivel de manera que los ecosistemas se adapten naturalmente al cambio climático. 

Para que la aplicación de la Convención sea efectiva, se elaboran decisiones que han de ser ratificadas por todas las Partes por consenso. Estas decisiones se discuten y aprueban en las Conferencias de las Partes (COP, por sus siglas en inglés). 

El Protocolo de Kyoto, acuerdo por el que en 1997 los países industrializados se comprometieron a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. 

Debido a un complejo proceso de ratificación, entró en vigor el 16 de febrero de 2005. El Pacto, suscrito en la actualidad por 192 Partes, solo pide a esos países que adopten políticas y medidas de mitigación y que informen  periódicamente. Además, introduce un elemento importante, el establecimiento de mecanismos de mercado flexibles, que se basan en el comercio de permisos de emisión. Es decir, además de las medidas nacionales para reducir las emisiones, el Protocolo ofrece un medio adicional para cumplir los objetivos mediante tres mecanismos de mercado. Por un lado, el comercio de emisiones; además, el Mecanismo de Desarrollo limpio; y, por último, la Aplicación conjunta

El Acuerdo de París sobre el Cambio Climático, un tratado internacional sobre el cambio climático que es jurídicamente vinculante.

Fue adoptado por 196 Partes en la COP21 en la capital francesa, el 12 de diciembre de 2015 y entró en vigor el 4 de noviembre de 2016. Su objetivo es limitar el calentamiento mundial por debajo de 2 grados centígrados, preferiblemente 1,5, en comparación con los niveles preindustriales. 

La Unión Europea (UE) y sus estados miembro han firmado y ratificado el Acuerdo de París y están firmemente comprometidos con su aplicación. En consonancia con este compromiso, los países de la UE han acordado situar a la Unión Europea en la senda para convertirse en la primera economía y sociedad climáticamente neutras de aquí a 2050. 

Repsol contra el cambio climático

una carretera entre un bosque denso

Nuestras soluciones

En 2019, Repsol fue la primera compañía de su sector en fijarse el objetivo de ser cero emisiones netas para 2050, alineando su Plan Estratégico 2021-2025 con los objetivos establecidos en el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático. 

En la consecución de este propósito, nuestra compañía se ha fijado una exigente hoja de ruta, que incluye metas ambiciosas de reducción de emisiones. 

Únete a Repsol

Si quieres formar parte de la solución, únete nuestro equipo ahora

Buscamos personas con talento que nos ayuden a crear valor de manera sostenible

Somos una compañía global en la que trabajamos más de 24.000 personas, de 70 nacionalidades en 32 países